Antes de padecer una ingesta musical desproporcionada gracias a Youtube y las redes sociales, cuando funcionaba más el boca a boca al uso, comprabas un disco al que acababas por conocer a la perfección porque lo escuchabas una y otra vez, no había más que la radio, tus discos y los discos prestados. Ahora, de vez en cuando, entre amigos, surge un tema de conversación en el que me encuentro especialmente cómodo: "¿Has escuchado un grupo/artista llamado X?".
Gracias a una recomendación como la mencionada llega a mis oídos un tal Jamie Woon, un inglesito de 28 años que estudió en la misma escuela que Amy Winehouse (parece ser que al menos intentaron educarla), el discípulo de Burial le llaman y que como curiosidad podemos saber que fue corista de Björk. Vale, ¿Y?
Jamie Woon construye sus temas basados en el R&B y guiños al dubstep y les da un toque electrónico por medio de samplers, vocoders mientras mantiene el tono lúgubre de las composiciones, incluso cuando no están co-producidas por Burial, que sólo está presente en las tres primeras pistas del disco, Mirrorwritting, con el que este cantante, compositor y productor está haciendo bastante ruido sobre todo en territorio inglés y estadounidense.
Gracias a una recomendación como la mencionada llega a mis oídos un tal Jamie Woon, un inglesito de 28 años que estudió en la misma escuela que Amy Winehouse (parece ser que al menos intentaron educarla), el discípulo de Burial le llaman y que como curiosidad podemos saber que fue corista de Björk. Vale, ¿Y?
Jamie Woon construye sus temas basados en el R&B y guiños al dubstep y les da un toque electrónico por medio de samplers, vocoders mientras mantiene el tono lúgubre de las composiciones, incluso cuando no están co-producidas por Burial, que sólo está presente en las tres primeras pistas del disco, Mirrorwritting, con el que este cantante, compositor y productor está haciendo bastante ruido sobre todo en territorio inglés y estadounidense.